Sandra A. Trevino

Sandra A. Trevino

Las Perlas del Punk

20 October, 2018

Es casi desalentador saber que todos estos años más tarde, cuando las nuevas generaciones de mujeres hacen música punk potente, las mujeres en las artes escénicas siguen topándose con los mismos desafíos que muestra el documental Todos Están Muriendo Aquí (México, 2000). Pero en vez de desanimarnos, preferimos empoderarnos con las historias de mujeres en Chicago –en este caso Alice Underhill y Kerry Cardoza—, que han encontrado una sensación de libertad en la comunidad punk de la ciudad.

Crecí en Chicago escuchando todo tipo de sonidos en la calle, ya sea saliendo explosivamente de los carros que se paseaban por el vecindario o de algún boombox de alguien sentado frente a su casa. Nunca faltaba la salsa, el top 40 o el rock de fondo mientras caminaba por mi cuadra. Fue en la escuela secundaria, en Texas, donde empezó a crecer la riotgrrl dentro de mí y aprendí todo lo que había que saber sobre las mujeres que hacían rock. Hoy es motivante conocer rockeras como Alice Underhill y Kerry Cardoza que comparten su arte, sus palabras y sus experiencias a través de la música, revelándonos las interioridades de la comunidad punk de Chicago y su papel en sus vidas.

Kerry Cardoza, que se estableció en Chicago en 2013, es cantante y letrista de la banda post punk Espejos. En su trabajo de periodista cubre arte, cultura, espectáculos y actividades en la comunidad para publicaciones como Chicago Reader, Newcity y Medill News Service. En relación con el tema que ocupa este número de contratiempo, Cardoza ha escrito en varias ediciones de El mejor punk en Bandcamp.

Cuando le preguntamos sobre su amor por esta música, Cardoza dice que la ha disfrutado desde la adolescencia, primero por su hermana mayor y luego yendo a espectáculos. “Cuando estaba en la universidad me di cuenta de la falta de mujeres en el punk. ¡Hasta escribí mi tesis sobre esto! Me gusta la energía, el ambiente, y el aspecto político, que para mí es muy importante. Me gusta que exuda anti-capitalismo, política radical. En Boston, donde crecí, la escena punk era diferente; aquí en Chicago es mucho más amplio e inclusivo de todas las edades, todos los géneros.

Cardoza explica cuánto han costado los cambios, el progreso y los muchos logros, pero que todavía hay atrasos y estereotipos. “Cuando eres una mujer en una banda, la gente no te presta atención. Y a los que contratan, no les importa que sus bandas no tengan ni una sola mujer¨.

Insiste en que las mujeres no deben esperar sino lanzarse, sobre todo a las que quieren tocar la música. “Mujer”, dice, “¡Agarra un instrumento y ya!” Nos habla de artistas como Victoria Ruiz (Downtown Boys), Alice Bag y FUPU, cuando le pedimos que mencione las rockeras que valora. Le mueve “su política libre e inspiradora, y su presencia radical en el escenario”. Algunas son autodidactas y tienen gran energía. Cardoza invita a los que se interesen que empiecen a ir a espectáculos, llegar a conocer a la gente, y reitera que hay un ambiente de apoyo entre las mujeres.

De La Villita, Alice Underhill es educadora, poeta, cantante y artista, y punkera desde chiquita. Aunque quería hablar solo español hasta que la obligaron a hablar inglés al entrar en la escuela, la transición fue fácil y pronto mostró afinidad por la escritura: le publicaron su primer poema en el noveno grado. Underhill creció escuchando música contemporánea, pop, R&B y artistas populares en la época como Hooters & The Blowfish, Michael Jackson y TLC.

 

 

Hill no sabía mucho sobre la música punk, especialmente de artistas que ahora admira como Pussy Riot, hasta mucho más tarde en la escuela, cuando la abrumadora angustia la llevó a lo que ella considera la “cruda honestidad y apertura” de la música que la hace sentirse libre. Admira a músicos como Alouette y la artista folk Jessica Lea Mayfield, a quien considera una punk en la guitarra.

Profundizamos sobre este mundo mayormente subterráneo y sobre los elementos patriarcales que también allí existen. Subhill explica que todavía hay esa idea de que tienes que “ser como los hombres” si quieres reconocimiento, aunque insiste en que hay un fuerte sentido de comunidad. “Somos aliados y nos defendemos unos a otros”, dice. “Se trata de nunca callar.”

Para Underhill, “el punk es el momento de expulsarlo todo” y fue en algún momento su refugio de la depresión. Underhill me dice que se pone perlas todos los días y se considera romántica. Es un contraste presente también en su escritura y su arte: de cierta forma, ese carisma y estilo se refleja en el lirismo más consciente que actualmente acompaña el punk experimental y la música hardcore que realiza en las bandas Mr. Underhill y vs >Mothman (No se bien si esta bien este nombre). Este es su poder a través del punk.

Aunque la música sigue siendo un campo dominado por hombres, las mujeres seguirán trayendo rock a los escenarios. No hay disuasión ni desánimo posible, no hay absolutamente ningún deseo de retroceder. En Chicago, las mujeres siguen probando que apoyarán a las demás para que se expresen, se defenderán entre sí, y buscarán esos elementos que traen unión y armonía. Que viva el punk.

*Escrito y dirigido por el artista Ali Gardoki, la película autobiográfica sigue la vida de las mujeres que formaron las Ultrasónicas, una banda de garage punk de frente femenino formada a principios de los 90 en la Ciudad de México. Lo que Jenny Bombo dice en el comienzo de la película, “No todos están acostumbrados a aplaudirle a una vieja” parece hacer eco de lo que siente el propietario de un club que con el patriarcado a flor de piel, explica lo difícil que podría resultar para las Ultrasónicas ser plenamente aceptadas en una comunidad dominada por hombres. “Tendrías que cambiar toda la forma de pensar de generaciones de hombres en este país.” Sin embargo, no deja de mencionar la importancia del papel de las Ultrasónicas como representantes femeninas del género.