Fabiola Rivera

Fabiola Rivera

Crear para la memoria

21 March, 2024

Pintar en un espacio público es un ejercicio en el que creamos un diálogo con el espectador a través de nuestra propia expresión. La naturaleza del trabajo nos lleva a participar y conocer a las personas que frecuentan los espacios. Nos vuelve partícipes y espectadores.

 

Hace un año me invitaron a venir de Ciudad de México a Chicago, para realizar un mural en la comunidad de Archer Heights. Las mecenas de esta enorme pared buscaban regalarle a la comunidad una pieza de arte que contara una historia de amor, con la que las personas que transitan la zona pudieran sentirse identificadas y que al mismo tiempo transmitiera un mensaje de diversidad e identidad. Me pidieron algunos puntos importantes para ilustrar: los trajes típicos del lugar de orígen de las dos familias provenientes de los estados mexicanos de Michoacán y Jalisco, que en el movimiento del mural las protagonistas se encontraran bailando, y sobre todo que pudiera incorporar algún símbolo de diversidad sexual. 

Este mural es parte de un conjunto  de tres murales que sumados, miden poco más de 2000 pies cuadrados, y fue gestionado por la artista local de origen rumano “Diosa” quien buscó dar voz y espacio a distintas mujeres en un entorno dominado por hombres, como lo es el arte urbano. Los espacios para mujeres se siguen percibiendo condicionados. Trabajar un muro de este tamaño en la ciudad es difícil, pero alza la voz de mujeres capaces de buscar y encontrar medios y espacios propios, rompiendo estigmas al desarrollar trabajos que normalmente se creen físicamente aptos solo para hombres.

“Danza nuestro corazón” es una ilustración a gran formato en la que se sintetizan muchas ideas para convertirlas en una sola imagen, donde se cuenta una historia que a la vez se relaciona con el supermercado mexicano que está junto a la estación de metro Pulaski, y que es donde se encuentra el mural.

Para mí, fue un proyecto de mucha nostalgia, una oportunidad para poder pintar temas que me gustan y poder retratar algunas de mis propias vivencias. Durante el 2020 realicé una residencia artística en Tacámbaro, Michoacán, lo que me llevó a recorrer buena parte de ese estado, así que quise retratar la belleza y abundancia de tan mágica tierra. Regalar un pedacito de los retratos de México que guardo en mi corazón y dejarlos en Chicago.

En Chicago la presencia de la cultura mexicana es muy importante. Al hablar de arte público pensamos en localidades muy específicas como Pilsen, La Villita y algunos espacios cerca del centro donde artistas latinos y mexicanos han podido entrar. Sin embargo, fuera de los “tours y los titulares” el sur de Chicago es un área llena de arte y graffiti. Sus calles y puentes se encuentran llenos de piezas, bombas, throw ups, tags y caracteres, donde generaciones de artistas y escritores (de graffiti) han resistido la criminalización de esta expresión urbana, y siguen creando y gestionando sus propios espacios.

Es una lástima que se siga censurando algunas expresiones de arte, como pasa con el graffiti. En este enorme muro se utilizó principalmente pintura en aerosol, que permite trabajar de manera rápida, consiguiendo colores brillantes y duraderos. Sin embargo, nunca había conocido una ciudad o poblado donde la pintura en aerosol fuera ilegal desde hace 30 años, En Chicago lo es, lo cual suma una dificultad a la logística.  Comprar pintura dentro de la ciudad es una experiencia compleja, ya que dentro de la ciudad solo puedes encontrar algunos vendedores clandestinos. Si tienes recursos suficientes, auto y tiempo puedes manejar una hora fuera de la ciudad para comprar tu material de trabajo. Una contradicción en una ciudad cosmopolita, con uno de los museos más importantes de arte en América que sin embargo criminaliza la venta y uso de la pintura en aerosol, lo cual censura y crea una barrera social del acceso al arte y la expresión.  

 


Fabiola Rivera es una diseñadora, artista y educadora originaria de la Ciudad de México y basada en Chicago. Su enfoque radica en la ilustración digital y la creación mural, combinando su identidad cultural con influencias contemporáneas. Inspirada por sus viajes a través de México, su arte refleja vivencias y memorias, tejiendo metáforas entre la naturaleza y la experiencia humana. Su obra ha sido destacada en National Geographic en Español, consolidando su impacto tanto a nivel nacional como internacional y ha colaborado con el chef Rick Bayless, Museo Nacional de Arte Mexicano, Nike, entre otros.